domingo, 27 de enero de 2013

La condenada lucha por hacer desaparecer un punto que nunca quiso estar ahí


Hoy he leído esto:

"Si te concentras en el punto rojo,
sin que te des cuenta
el punto azul desparece".


Quizá se trate de eso. De centrarme en el punto rojo y cuando me quiera dar cuenta, ecco! Voilá! El punto azul habrá desaparecido, para siempre. Desde luego, siempre me gustó más el rojo, color pasión, aventurero, rebelde... Un azul tan tenue, es posible que haya aparecido ahí por pura casualidad, es posible que nunca haya querido estar ahí y vive simplemente condenado al olvido de alguien que prefirió centrarse en algo menos volátil, más seguro, más firme. Condenado o no, parece posible, el azul, puede desaparecer, si quieres.


No hay comentarios:

Publicar un comentario