sábado, 16 de abril de 2016

Lo sigo intentando.

Estoy intentando hacerme amiga del miedo,
y reírme a carcajadas cada vez que puedo.
Estoy intentando sonreír a cada niño con el que me cruzo,
y sumergirme en cada relación con el oficio de un buzo. 

Créeme, lo estoy intentando.

Estoy intentando no darle importancia 
al hecho de que no seas como te había imaginado.
Estoy intentando jugar sin que me importe el resultado,
relajarme cuando quiero usar el water, pero está ocupado. 

Créeme, lo estoy intentando.

Estoy intentando ser consciente de que el sol sigue ahí arriba,
estoy intentando controlar mi ira,
no tragar de golpe y así, poco a poco, saborear la vida.
Estoy intentando decir la verdad, 
y hacerlo de la manera que menos duela,
dejar de usar la rueda y gastar más suela.
Estoy intentando no echar la culpa a otros cuando algo sale mal,
pisar un suelo más natural,
salir de vez en cuando de esta ciudad áspera y artificial.

Estoy intentando aprender a sonreír 
cuando me demuestran que me equivoco,
a dejar de disimular que soy un loco,
a sentir la energía de cada pequeña cosa que toco. 

Créeme, lo estoy intentando.

Estoy intentando dibujar sonrisas en mi barrio,
intentando decidir si prefiero unos ojos o unos labios.
Estoy intentando memorizar cada sueño cuando me despierto,
y caminar sin dudar, porque cada instante de duda es un instante muerto.

Estoy intentando hablar más con desconocidos,
y no girar la cabeza cuando alguien me mira demasiado.
Estoy intentando ser neutral y objetivo,
tomarme la vida con la perspectiva del que no se queja aunque tenga algun motivo.
Estoy intentando escribir y vivir para volver a escribir
y hacer de ese crculo un maravilloso jardín en el que existir. 
Estoy intentando callar cuando no sé qué decir,
plantarme y discutir antes que agachar la cabeza y huir. 

Créeme, lo estoy intentando.

Estoy intentando darle de comer a cosas invisibles,
y a enamorarme de cosas insignificantes,
y a no darle importancia a esas cosas que nos venden como grandes.
Estoy intentando pensar más en los que me quieren, reírme de mis fobias. 

Estoy intentando que mi corazón no se acelere 
si se acercan quienes me odian. 

Estoy intentando asumir que el mundo no es justo,
y que el rencor de otros es lógico,
y que el amor se marchita si no lo riegas,
y que la muerte no avisa cuando llega,
y que quien juega limpio no siempre recibe apoyo. 

Estoy intentando dedicar más tiempo a mirar las estrellas,
a beber más agua, a abrazar, a besar,
y a dar muestras de afecto sin un motivo aparente.
Estoy intentando ser más imperfecto,
a hacer lo incorrecto, ser más imprudente.
Estoy intentando liberar al payaso que encerré
en la mazmorra de la vergüenza hace tiempo ya,
a no hacer algo porque lo hagan los demás,
a hablar con los animales y a tratarlos como a iguales.
Estoy intentando ser más insensata 
y así amar y entregarme sin medida.
Ser feliz aunque sea a ratos 
y darle un sentido a esto que llaman vida.
No sé si lo conseguiré pero

 créeme: lo estoy intentando.

-Nach-



martes, 12 de abril de 2016

Y en respuesta: me quemas, Fredi Leis.

Que aunque hayamos rehecho tu vida, 
yo voy más despacio. 
(...)

Que yo ya no me hablo conmigo
por haberte dejado.
Que solo me duele la voz
si me quedo callado. 




lunes, 11 de abril de 2016

Quiéreme si te atreves.




Supongo que, al final, todos encontramos alguna imitación barata del amor. Esa mitad con la que compartimos gustos, aficiones, tiempo, y que nos llena un poco. Nos llena la mayor parte del tiempo, pero siempre tenemos un vacío. El vacío que nos recuerda la crisis de los 30, de los 40, de los 50... y así hasta la muerte. Porque sí, estamos bien. Pero no lo hemos encontrado, o si en algún punto lo encontramos, como me pasó con él, lo dejamos ir. Simplemente porque no era el momento, no era fácil, no era posible. O ese millón de excusas que nos pone el miedo cuando se planta delante de su gran enemiga la felicidad. Y nos invade, y nos vence. Porque el miedo es un gran cabrón que conoce de sobra nuestra debilidad, y la felicidad es ingenua y no puede con él. Maldita envidia que domina al miedo. Maldito miedo que corrompe mi felicidad. Y eso fue él: un momento imperfecto, un millón de excusas, un 'quiero ser libre' cuando no me daba cuenta de que mi única libertad ocurrió contigo.



¿Capaz o incapaz?

domingo, 10 de abril de 2016

He intentado escribir 
un poema contando 
al mundo lo que siento. 
El poema me ha dicho que no 
quiere ser poema. Solo 
quiere ser vida. 
Te contaré un secreto:


y yo.



tú. 
Con esas ganas 
locas de querer.

yo.
Con esta vida a medias, 
esta tinta sin papel.


Tú.
Superando miedos 
dibujando alas al viento.

Y yo, que te quiero querer
y no te quiero.

p(r)o(b)(l)e(m)a

Sigo confiando en la humanidad.
Quizá ese sea mi único 

p(r)o(b)(l)e(m)a

martes, 5 de abril de 2016

Turnedo & Día 7 después de ti.



Turnedo de Iván Ferreiro:


Desde aquí, desde mi casa 
veo la playa vacía 
ya lo estaba hace unos días 
ahora está llena de lluvia 
y tú ahí sigues sin paraguas 
sin tu ropa, paseando 
como una tarde de julio 
pero con frío y tronando 
¿se puede saber qué esperas? 
¿que te mire y que te seque? 
¿Que te vea y que me quede tomando la luna? 
juntos la luna, tú y yo expectantes 
a que pase algún cometa 
o baje un platillo volante 

Y la playa llora y llora 
y desde mi casa grito 
que aunque pienso en abrazarte 
que aunque pienso en ir contigo 
el doctor me recomienda 
que no me quite mi abrigo 
que no esté ya más contigo 
y yo no puedo negarme 
pues el tipo soy yo mismo 
estudié mientras dormías 
y aún repaso las lecciones 
una a una cada día 

Yo no puedo aconsejarte 
ya es muy duro lo que llevo 
dejemos que corra el aire 
y digámonos adiós. 

Aunque siga suspirando 
por algo que no era cierto 
me lo dicen en los bares, 
es algo que llevas dentro 
que no dejas que te quieran, 
sólo quieres que te abracen 
y publicas que no tuve ni valor para quedarme, 
yo rompí todas tus fotos 
tú no dejas de llamarme 
¿Quién no tiene valor para marcharse? 
¿Quién no tiene valor para marcharse? 
¿Quién no tiene el valor para marcharse? 
¿Quién prefiere quedarse y aguantar? 
Marcharse y aguantar.



Enlace a día 7 después de ti, de Patricia Luna: http://uncafeyteamo.blogspot.com.es/2015/06/dia-7-despues-de-ti.html






domingo, 3 de abril de 2016

¿Y tú?

Y tú por ahí, perdido 
por las calles de Madrid. 
Regalando canciones
a quien no las merece. 
Deshaciendo tu alma
entre versos que no son los míos.
Y yo por aquí, recitando
en cada rincón de la ciudad
tu nombre. Recordando cada beso
que me diste aquella noche. 
Cada verso que te escribí
la mañana siguiente 
con mi cama vacía. 
Ya no publicas canciones
ni le dices al mundo
que atravesarás fronteras
(como si yo fuera otro país,
otra luna). Ya no apartas
los ojos de tu móvil 
para no contestarme
demasiado pronto. Tu miedo
ha dejado de existir 
desde aquel día en que decidí 
echarte de mi vida, por mi miedo
a tenerte solo a medias. 
Ya no te tengo, 
pero yo no te olvido. 
¿Y tú?
¿has conseguido olvidarme?