lunes, 25 de enero de 2016

Puta.





Me he pasado veintisiete años
pensando que la vida era un burdel
y yo su puta.
Con cada año una cama
(Y una casa) vacía
He forjado amistades en meses que resultaron eternas.
Y he vivido amistades en años que resultaron efímeras.
He reído, he llorado, he llorado y he llorado, he gritado, he vivido. Y seguía pensando que ella era un maldito burdel de cama vacía, y yo su puta.


Y de repente,
tú.

Al verte se rompieron las cadenas que me ataban a esa angustia.
Y me hablaste de dar un paseo,
Algo bello. Al fin, entre tanta mugre.
No te creí. No suelo reconocer el amor de verdad cuando lo tengo en frente. Sigo creyendo que la vida es un burdel y que yo aún soy puta. Pero llegaste con esa magia. Esa forma tuya de existir.

Si te imagino, vuelas.

Llegaste, y lo invadiste todo.
Nos mudamos. Fuimos familia. Reímos, lloramos, gritamos, vivimos.
Y tú, me enseñaste que es verdad, la vida siempre será un maldito burdel, pero solo depende de ti ser su puta.
Me enseñaste que la mugre era un poco de polvo acumulado.
Con veinte años habías vivido cien vidas y habías amado a todas y cada una de las personas que te habían rodeado.
Las habías amado, como no supieron amarte a ti.
Me enseñaste, que no hay excusas, que no hay miedos. Que el amor no viene de nuestros padres si no que va hacia nuestros hijos. Contigo, el burdel se volvió un hogar y un sitio donde refugiarse a veces, porque la vida no es tan mala, ni yo tan puta.
Me enseñaste a amar con todo. Me enseñaste a respetar y a aceptar cosas inimaginables. Me enseñaste que la palabra sexo y la palabra puta significan muchas cosas, no las que todos creen, y que pueden caber en un poema.
Por vez primera alguien heredó mis libros, y se quedó durante noches escuchándome. Alguien me miró como si yo fuera algo más que lo poco que soy.
Por primera vez, la vida me regaló una hermana pequeña que había vivido mi misma vida en otra punta del mundo, y que sabía quererme mucho más de lo que yo nunca podré ni sabré hacerlo.



No hay comentarios:

Publicar un comentario