jueves, 12 de febrero de 2015

El día en que nunca dejé de amarte.



Hay Jueves que son eternos y terminan en tu boca. Hay Jueves tan fugaces que si te he visto, no me acuerdo. Jueves, que empiezan en tu espalda y acaban con tu pecho como almohada. Hay Jueves que no vives, hay Jueves que no existo. Hay Jueves que ni si quiera deberían ser Jueves porque están demasiado cerca del Viernes pero muy lejos de tu cama. Hay Jueves en que te amo demasiado y Jueves en que me gustaría no hacerlo. Pero hoy, amor, no sé si quiera qué día es hoy, pero sea Jueves o no, será el día en que nunca dejé de amarte.

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