¿Por qué ella ha de morir
para que tú te salves
de la agonía
que supone no ser amado?
(En las noticias comentan que ya van cuatro. Una madre dice: Ah. Pero es otra nueva. Pensaba que era la misma. Y la normalidad congela los corazones de todos los hogares)
Si somos capaces de matar a una flor
en busca del sí que no pronuncian
unos labios,
¿qué haremos cuando esa boca
nos hable de libertad?
No hay comentarios:
Publicar un comentario